cuentos de un cazador de instantes

La Palma

¿Y por qué no? No, no me refiero a que vaya a visitar La Palma [@ Wikipedia]. Bueno, sí, es probable que a final de año con Sulaco y Luis. Y también es posible que vuelva con mi mujer el año que viene, quizá para celebrar nuestro quinto aniversario de bodas. La Palma es una isla fantástica en muchos aspectos. De hecho es, para mi gusto, la mejor del archipiélago. Pero no, no es por eso.

Miami y Everglades - Florida

En el anterior capítulo de la saga de Florira [El Centro Espacial Kennedy - Orlando], comenté que la visita a Cabo Cañaveral fue la mejor experiencia del viaje de dos semanas que hicimos mi mujer y yo con una pareja de amigos a Florida a finales de septiembre del año pasado. Visitar el centro espacial fue una ruptura a la monotonía de los parques de atracciones de Disney y Universal [Los parques de atracciones en Orlando] y a la sobredosis de outlets y centros comerciales [Jet Lag prorrateado] que predominaron en el día a día de esas dos semanas.

Calima, viento, cámaras y windsurfistas

Este viernes, al salir del trabajo, me recogió Luis, en su coche que no es todo terreno pero que el propietario está empecinado en meterlo en cualquier sitio, como ya conté hace unos días en Paseo con Luis, Sulaco y un holandés (supuestamente no errante), y cogimos carretera directos a Pozo Izquierdo para ver la final —¿o se disputaría el sábado? No presto mucha atención a este tipo de cosas— del campeonato de windsurf de este año.

VII Maratón fotográfico de Mesa y López: Y ya van dos

Sé que me repito más que el ajo, pero joder, es que hay que ver lo rápido que se me está yendo la vida. Y a veces pienso que por el retrete. Parece que fue ayer cuando acudí por primera vez al Maratón fotográfico de Mesa y López. Y ya ha pasado un año. Volando. Asombrosa la cantidad de cosas que he hecho durante este tiempo y lo poco que me parece que ha pasado…

Amaneceres en Madrid

Hace ya unos días que se cumplió mi cuarto mes de estancia en Madrid. De alguna forma se van confirmando los planes dentro de planes dentro de planes que ya sospechaba cuando vine a pasar, en teoría, no más de seis meses. Probablemente cuatro. En buena medida estoy catalizando la peor de las alternativas posibles, pues ya se sabe que el futuro nunca está escrito —del todo—; pero hay cosas que me superan y ando un poco harto de estar harto.

Cabalgata de Carnaval de Las Palmas

Si algo estoy echando de menos durante mi estancia en Madrid es la compañía de mi mujer. Así que, aprovechando las circunstancias, cogí un avión el viernes para pasar dos días en la ciudad que me vio nacer. Lo de «y morir» de momento lo dejamos en espera. El fin de semana pasado, salvo que vivas bajo tierra o haciendo el anacoreta en alguna cueva perdida desfogándote con cabras, sabrás que coincidió con el Día de San Valentín, día en el que los —apurados por las circunstancias— comerciantes se frotaban las manos de satisfacción; como lo haría una mosca frente a un buen truño recién puesto y humeante, salivando de placer anticipado al imaginar el banquete que le espera.

Una cabalgata bastante mediocre

Después de muchos años sin acercarme a una, el pasado 5 de enero, víspera del Día de Reyes, pese a estar cansado como un chucho, acepté acompañar a mi mujer, a su hermana y cuñado, para que nuestra sobrina, en edad de comenzar a dudar sobre la verdadera identidad de los Reyes Magos, tuviese un acercamiento en primera persona con sus realezas durante la tradicional cabalgata de reyes. Como hace tiempo que ando detrás de meterme a hacer fotografías en un evento de este tipo, aunque más pensando en la cabalgata de Carnaval, cargué con la cámara, junto con su inseparable 18-200, con la sana intención de conseguir puesto en primera fila y poder obtener alguna instantánea interesante.

Los pajarillos de la estación de El Barrial Centro Comercial

Hace ya dos meses que la empresa decidió que era más valioso en Madrid que haciendo las veces de responsable de la delegación de Las Palmas. Más allá de los planes dentro de planes dentro de planes que veía en esta decisión, la acogí con los brazos abiertos porque me daba una oportunidad -todo pagado- que no había tenido hasta la fecha: vivir en una gran ciudad. Cuando llegué no tenía ni idea de cuánto duraría.

Sevilla en números

Después de casi cuatro meses desde que hicimos el viaje, he terminado de repasar y elegir las fotografías que he venido publicado, poquito a poco, en el álbum de flickr relativo a los días que pasamos en Sevilla. En total pasaron 152 fotografías. Menos si no eres familiar, motivo por el que reflejará una cantidad inferior. Lo que no está nada mal teniendo en cuenta que en cinco días y medio pulsé 580 veces el disparador, dejando que la cámara produjera su particular sonido de apertura y cierre del obturador.

'El mundo en imágenes'

Escuchaba a un amigo comentar un día que alguien le recriminaba que «nunca llegarás a ser un buen fotógrafo si no inviertes tiempo comprando libros y estudiando a los grandes». Falta de razón tal vez no tenga esa afirmación, pero lo cierto es que cada uno hace lo que hace por los motivos que a él le da la gana y alcanzará lo que aspire alcanzar por la vía que mejor le parezca.