cosas que agradezco haber descubierto y/o haber vivido
Cuando empecé esta bitácora, a mediados de 2008, tercera o cuarta reencarnación de mi deseo de trascender por la vía del exhibicionismo ciberespacial valiéndome del simplón mecanismo de ventilar las nimiedades que me acontecen o en las que participo, andaba también revisitando la mejor de las series divulgativas rodadas hasta la fecha, la mejor por su carácter y enfoque holístico: Cosmos. Algo de lo que dejé constancia unos meses más tarde —con mi particular forma de decir y escribir las cosas— en su correspondiente entrada [aquí].
En los despropósitos para este año le daba una probabilidad de éxito de un 70%. Y estaba siendo excesivamente generoso conmigo mismo, porque me conozco y a) tengo poco tiempo para nada (mi autoengaño favorito) y b) soy muy perezoso como para autoimponerme cualquier hábito de estudios a estas alturas. Sin embargo era un tema que desde mucho me llamaba la atención, así que me puse a ello el 7 de enero.
Y no me estoy refiriendo a mi mujer comiéndome la ese final, práctica habitual en los canariones, no. Lo que quiero hacer notar es que está nevando y yo estoy aquí para verlo.
Ahora les voy a pedir que imaginen una escena, bastante común, por otra parte. Visualicen esa imagen del bebé regordete bañándose en su bañerita y chapoteando a gusto mientras se ríe. ¿La tienen? Así se siente el cerebro cuando se le suministra experiencias novedosas.
Desde que he unificado los blogs, la idea de adjuntar vídeos —y fotos— ajenos en mis entradas me produce prurito intenso. Pero éste merece la pena. Mucho.
Sumamente entretenida la exposición. Así, creo yo, es como deben enseñarse las cosas.
Y muchos hábitos por adquirir; o recuperar. Ahora lamento no haber insistido en poner una bañera en casa.
Esta entrada ha sido importada desde mi anterior blog: Píldoras para la egolatría
Llevo unos días reescuchando las distintas copias de Carmina Burana que he ido acumulando a lo largo de mi vida. Como al protagonista de Conspiración [@ FilmAffinity], quien estaba condenado a comprar copias y copias de El guardián entre el centeno, a mí me pasa lo mismo con la obra de Carl Orff y ya tengo cinco o seis en mi colección. Toda la obra es magnífica, aunque hoy me deleito en especial con el Omnia Sol Temperat [letra @ Retales de sabiduría].
Omnia sol temperat purus et subtilis, novo mundo reserat faciem Aprilis, ad amorem properat animus herilis et iocundis imperat deus puerilis
Rerum tanta novitas in solemni vere et veris auctoritas jubet nos gaudere; vias prebet solitas, et in tuo vere fides est et probitas tuum retinere
Ama me fideliter, fidem meam noto: de corde totaliter et ex mente tota sum presentialiter absens in remota, quisquis amat taliter, volvitur in rota
Y esta es la historia de Andrómeda, la gatita negra, mansa, y atemorizada que se dejó coger por unos desconocidos. Esa misma primera noche trepó de un salto a nuestra cama y se acurrucó entre nosotros. Entonces pude comprobar por primera vez que el ronroneo de los gatos efectivamente tiene el poder de curar casi todos los males del cuerpo, e incluso algunos del espíritu.
Manel Soria Guerrero (Frikosal) Andrómeda y oponerse a la corriente
El tiempo pasa volando. Perogrullada. No resulta tan de perogrullo que lleve seis años casado con la que sigue siendo la persona más importante en mi vida. Y menos aún que en unos meses se cumplan catorce años que comenzamos una relación. Asombroso. Algo bueno tuve que hacer en otra vida :-)
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Es curioso, realmente curioso, cómo hay canciones que vienen a uno en ciertos momentos de nuestra existencia; y cómo tantos años después reaparecen.
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Por último pedir diculpas por el contenido.
Ayer se fastidió el plan de tarde de cine que teníamos previsto mi amigo David y yo. Para pasar el rato —y desquitarnos— nos acercamos al Media Markt a ver qué películas tenían por menos de 10€. Me tropecé en BluRay con ‘El indomable Will Hunting’ y no me lo pensé dos veces. Junto con la segunda parte de ‘El padrino’ —a 9€— ese fue mi botín de guerra.
‘El indomable Will Hunting’ es una película que me encanta.