universos que caben en la mano y alimentan el espíritu

'Eric'

La novena novela de la saga Mundodisco no me ha gustado. Pero nada de nada. Siendo bastante corta para lo que es la media de las novelas de esta saga, estuve a punto de dejarla un par de veces. Terry Pratchett retoma las andaduras del inútil Rincewind y su inseparable baúl ciempiés llamado Equipaje allí donde acabó en la novela anterior, ‘Rechicero’, y que es traído de vuelta a esta dimensión en ‘Fausto Eric’, por gracia y obra de un niño con ganas de practicar las artes arcanas de invocación demoniaca.

'¡Guardias! ¿Guardias?'

Hace un mes comentaba que ‘Pirómides’ era la mejor novela de la saga Mundodisco que había leído hasta el momento. Básicamente porque se alejaba de los magos y de las brujas para recrear un entorno diferente. Esa era la séptima novela y pensé que, siendo el estilo que era el de los libros y la prosa, con sus limitaciones, de quien venía, difícilmente habría alguno otro libro de la serie que lo superase.

'El vendedor de tiempo'

Si bien el anterior libro comentado aquí, ‘El pornógrafo emprendedor’, lo compré porque me llamó su subtítulo, éste estuve a punto de dejarlo en la estantería por el comentario, la alabanza, que se lee en la parte alta de la portada. Me resultó tan ultraneoliberalista la mención que me hice una imagen mental —prejuicios, vamos— de un libro reaccionario en el sentido fachento de la palabra. Vamos, un libro dedicado a elevar como divinas las virtudes de un mercado libre que, en estos últimos años y una vez más, se ha demostrado imperfecto por cómo y cuan fácilmente se ha dejado corromper en sus intenciones.

'El pornógrafo emprendedor'

Del libro ‘El pornógrafo emprendedor’ me atrajo inmediatamente su subtítulo, «Aventuras empresariales de un ejecutivo que casi triunfa», y no tanto el que versara sobre —supuestamente— pornografía. Si de mí dependiera, como potencial consumidor pornográfico creo que la industria del sexo no habría llegado a florecer demasiado. Pero hay mucho adolescente en cada generación, y mucho adulto que con algo ha de llenar el espacio de tiempo que hay entre dos temporadas de fútbol.

'El hombre demolido'

Soy consciente que en sesenta años las florituras en la prosa pueden cambiar mucho. De hecho, hasta la propia prosa podría cambiar mucho. Es como las series de televisión. ¿Alguien se imagina cómo podría ser ‘La casa de la pradera’, por poner un ejemplo traído por los pelos, en versión siglo XXI? Desde luego habría bastante más sexo —incluso explícito— y mucha más sangre —rayando el gore— del que hubiera entonces.

'Pirómides'

Tras seis novelas de Mundodisco, en las que ha primado el protagonismo de magos y brujas, resulta ligeramente extraño el cambio de registro que te encuentras en la séptima novela de la saga (o franquicia, térmico con el que gusta llamar la gente sapiente a las cosas que se prolongan en el tiempo —y el espacio—). En esta ocasión, empezando en la ya históricamente céntrica Ankh-Morpork, la parte importante de la historia —y su desenlace— se desarrollará en un país que, por costumbres, ceremonias y creencias se parecerá mucho al Egipto que ocupa nuestras fantasías aventureras, y al que hay que visitar para disfrutar de muchas ruinas con milenios de antigüedad, y para sufrir a mucho vendedor intentándote vender hasta los pantalones.

'Cadena crítica'

Tras leer ‘La meta’, libro que tengo intención de releer a lo largo del año 2010, decidí embarcarme en la compra del resto de la bibliografía de Eliyahu M. Goldratt. Lo que me ofrecía la Teoría de las limitaciones, intelectualmente hablando, me atrajo desde el primer momento. Yo también quería ser un TOC-boy. Así que, sin pensarlo mucho, solicité los cuatro libros que hay publicados en español después del ya mencionado.

'Guía del autoestopista galáctico'

Existe un dicho que reza «Dios los cría y ellos se juntan» y, en cuanto a gustos literarios, ha sido mayoritariamente cierto en lo tocante a las amistades de los años de instituto. Salvo como curiosidad estadística, que convierte en excepción a mis dos mejores amigos de siempre, los cuales pasan absolutamente de la ciencia ficción, el resto de mis amigos, con los que quedaba asiduamente y con los que sostuve la relación durante un poco más de tiempo que con el resto, pasada la época estudiantil, eran considerablemente aficionados al género de los viajes interesterales.

'Alvin Maker I: El séptimo hijo'

He dicho -y como tengo pocos temas de los que hablar, seguiré repitiendo- que tengo una lista de libros por leer que tiende a la enormidad. He perdido la cuenta y no quiero actualizarla, pues podría deprimirme. Los tengo todos repartidos por distintos lugares. Algunos están en varias estanterías, en mi casa. Y los que llevan más tiempo esperando, aún están en casa de mi madre, suspirando por que vaya a buscarlos.

'Neuromante'

Si para mí ha tenido algo de particular el año que pronto dejaremos atrás ha sido el del reencuentro con la lectura. En realidad comienza antes, en 2008. Posible reflejo de ello sería que mi «carta a los reyes» del año pasado estaba casi completamente dominada por libros. Este año será igual. Libros y películas. Desde que descubrí la calidad cuasi HD de mi televisor, ya son unas cuantas las películas que van incrementando mi colección en alta definición.