Los dispensadores de Príncipe Pío

Ya he comentado en varias ocasiones que Príncipe Pío es una de las estaciones que más me gustan. Conservando el espíritu original de mitad del siglo XIX, le creció desde casi sus entrañas un Centro Comercial bastante coqueto en el que hay salas de cine. Príncipe Pío es un intercambiador pues en un mismo punto confluyen líneas de tren de cercanías, líneas de metro y buses guaguas. Además de tener una parada de taxis enfrente.

La cotidianeidad llena de fogonazos de aprecio

La cotidianeidad anda llena de fogonazos de aprecio, clamores de amistad y aspavientos de simpatía que se diluyen al minuto de haberlos manifestado. La adrenalina de la voluntad espasmódica tiene eso: tal como viene, se va. Son propuestas impulsadas por subidones de euforia, deseos sin moral, intenciones sin raíz, anhelos de hielo. El reloj sin agujas Ángela Becerra Columna “The end” Periódico ADN Miércoles 27 de enero de 2010

Lenguaje con pedigrí

Cocoa has one of the most distinguished pedigrees of any object-oriented development environment. From its introduction as NeXTSTEP in 1989 to the present day, it has been continually refined and tested (see “A Bit of History”). Its elegant and powerful design is ideally suited for the rapid development of software of all kinds, not only applications but command-line tools, plug-ins, and various types of bundles. Cocoa gives your application much of its behavior and appearance “for free,” freeing up more of your time to work on those features that are distinctive.

Actividades sospechosas

¿Qué es lo que era el paquete? ¿Contrabando? ¿Tráfico de algo? ¿Tal vez estupefacientes? ¿O fue todo fruto de mi imaginación? Tengo una imaginación fértil, desbordante, caótica, anárquica y con voluntad propia. De eso estoy seguro y doy fe. Hay que tenerla para seguir creyendo que el Neoliberalismo acabará retrocediendo ante los Derechos Sociales. Por ejemplo. Pero esto hace que haya veces en las que vea cosas que no son ciertas del todo.

'Guía del autoestopista galáctico'

Existe un dicho que reza «Dios los cría y ellos se juntan» y, en cuanto a gustos literarios, ha sido mayoritariamente cierto en lo tocante a las amistades de los años de instituto. Salvo como curiosidad estadística, que convierte en excepción a mis dos mejores amigos de siempre, los cuales pasan absolutamente de la ciencia ficción, el resto de mis amigos, con los que quedaba asiduamente y con los que sostuve la relación durante un poco más de tiempo que con el resto, pasada la época estudiantil, eran considerablemente aficionados al género de los viajes interesterales.

Curiosidades inconexas de Madrid y los madrileños

Hace ya unos días que se ha cumplido, sin descontar las dos semanas que pasé por Navidad en Las Palmas, tres meses que me desterraron a Madrid. En varias ocasiones he comentado lo bien que me siento aquí, en una ciudad grande, con lugares nuevos que conocer y con, esto es fundamental, un transporte público de envidia. Las grandes ciudades se construyen sobre buenos sistemas de transporte público. Los gobernantes que olvidan este detalle a) no quieren a su pueblo y b) condenan a la ciudad al caos.

Wacom Bamboo

Resulta casi asombroso que en todo este tiempo no haya escrito ni una pequeña reseña sobre mi querida amiga Wacom Bamboo. ¿O ya lo he hecho y no logro recordarlo? En cualquier caso, hecho o no, valga este instante para aprovechar y mencionar lo contento que estoy con mi tableta Wacom Bamboo, pequeña ella pero bien provista, y que responde perfectamente a mis caricias. Lo nuestro se trata —resulta obvio— de una relación física, pura y exclusivamente.

El que se ahoga es un bruto...

—¿Qué tienes ahí? —Nada —El que nada no se ahoga. El que se ahoga es un bruto. Bruto mató a César. Cesar fue emperador de Roma. Roma está en Italia. Italia está en Europa. Europa está en el Mundo y el Mundo es una pelota. ¿A que sí, papi? —Claro, claro Extracto de una conversación mantenida por dos niñas, tal vez de 11 y 9 años, y su agotado padre, mientras esperábamos a que la cinta empezara a escupir nuestras maletas este miércoles pasado, cuando volvía a Madrid desde Las Palmas.

Mazinger Z (y las cosas de mi hermana)

Creo que tendría 6 o 7 años cuando en Televisión Española comenzaron a emitir los capítulos de Mazinger Z. Si no recuerdo mal lo hacían después del telediario, a las dos y media de la tarde, y únicamente emitían los sábados. Como todo niño la gran mayoría de los niños de mi edad, porque también los había raritos a los que no les gustaba, alucinaba con la serie de dibujos más cañera que recordaba; con esa edad tampoco es que hubiera visto mucho digno de recordar en un sistema en el que, en la práctica, solamente existía una cadena de televisión y era pública.

Una cabalgata bastante mediocre

Después de muchos años sin acercarme a una, el pasado 5 de enero, víspera del Día de Reyes, pese a estar cansado como un chucho, acepté acompañar a mi mujer, a su hermana y cuñado, para que nuestra sobrina, en edad de comenzar a dudar sobre la verdadera identidad de los Reyes Magos, tuviese un acercamiento en primera persona con sus realezas durante la tradicional cabalgata de reyes. Como hace tiempo que ando detrás de meterme a hacer fotografías en un evento de este tipo, aunque más pensando en la cabalgata de Carnaval, cargué con la cámara, junto con su inseparable 18-200, con la sana intención de conseguir puesto en primera fila y poder obtener alguna instantánea interesante.