"aisatsu no kotoba" o la dominación global


Esta entrada ha sido recuperada gracias a Wayback Machine de un blog que mantuve en La Coctelera.


Pasado el ecuador -hace ya un par de meses- del año 2007, creo estar en disposición de asegurar que este, cuando concluya, habrá sido un buen año para mí. Y lo digo aún corriendo el riesgo de que se tuerza y se acabe jodiendo, que nunca se puede saber. Pero, desde luego, pasados ya ocho meses, no ha ido muy mal y, sospecho, aunque se tuerza, al acabar la balanza aún seguirá siendo positiva.

Tanto ha sido así que, por primera vez en mi vida, creo recordar, y cumplidos ya los 35 años, he decidido dominar el mundo, dicho en minúsculas para no levantar aún demasiadas alarmas, y dar así buena cuenta de aquello que los arcanos escribieron en mi destino.

Es sabido que toda meta de estas dimensiones ha de ser proyectada y planificada a conciencia. Por ello he desarrollado una lista de las treinta y una cosas que debo hacer para dominar el planeta. Por supuesto no las voy a revelar hasta que las haya conseguido, o realizado, para que no se me adelante ningún espabilado y me usurpe lo que por derecho me pertenece.

Sin embargo adelanto ya que no son cosas excepcionales, pues los grandes planes maestros, los que de verdad valen la pena, son aquellos que están encaminados por metas pequeñas. Es el orden en que las realizas lo que te garantiza el éxito. Permitiéndome un símil culinario, un gran plato se elabora, muchas veces, empleando materias sencillas y comunes, pero son el orden y el tiempo correctos los que garantizan un gran fin.

Como digo, no es sólo el conocer aquello que debo hacer, que no todo es estrictamente secreto (como que me compraré la D3), sino el orden y el momento en que lo habré de realizar.

Lo cierto es que, además de lo de comprar la D3, que será mucho más adelante, ya he iniciado el tercer paso para dominaros a todos: Me he apuntado en clases de japonés.

Dentro de poco todos obedeceréis mis órdenes [mwahahaha]

¡Hala, ahí queda la cosa!

PD: Si no respondo a los comentarios que hacéis no es por dejadez, es porque estoy entusiasmado y ocupado intentando dominaros. Disculpad las molestias.