Odiosa primera comparativa: 18-200 VR vs 80-200

Varias veces me he quejado de que mi 18-200 VR me ha decepcionado o, para ser algo más justos, no me ha respondido como yo esperaba (dichosas expectativas). Igual es un problema con mi unidad en concreto. Esto lo digo porque a veces veo imágenes tomadas por otra gente con el mismo objetivo y me sorprenden sus los resultados. No lo sé, pero lo cierto es que en más de una ocasión he repetido que, en cuanto pueda, lo sustituyo por dos objetivos, un 24-70 2.8 y un 70-200 2.8. El rango 18-24 lo tengo parcialmente cubierto por el Sigma 10-20. Más equipo, más peso, pero mejores imágenes. Eso espero. Y en fotografía, aunque sea aficionado, lo que se desea es obtener las mejores imágenes posibles… ¿O no?

Esta Semana Santa pasada quedé con el amigo Luis para visitar el Jardín Canario. Es la segunda vez que voy en este año (suele pasar mucho más entre dos visitas consecutivas), pero es un sitio que me gusta e invita a la fotografía macro, que es una de mis muchas asignaturas pendientes. Así que es posible que vuelva más veces este año. Luis es defensor del 18-200 VR, del que dice estar encantado. Sin embargo también posee un Nikkor 80-200 ED desde hace 18 años que se conserva como si lo hubiese comprado ayer. No lo usa mucho, dice, porque pesa demasiado como para llevarlo siempre consigo. Así que pasa la mayor parte en su funda original. Pero conocedor de mi insomnio dándole vueltas a si renuncio a la universidad de mis hijos y hundir más en la ruina a mi familia pillándome un 70-200 f:2.8, hizo el favor de cargar con él para enseñármelo y por si yo quería hacer alguna fotografía y probarlo, de paso. El día no invitaba a casi nada. Nublado y ligeramente lluvioso, nos pasamos una buena parte del tiempo hablando con otro fotógrafo aficionado que nos tropezamos, mientras nos resguardábamos de las gotas de agua que caían. No encontramos libélulas y no vi ocasión de hacer ninguna foto seria con él. Ya cuando nos íbamos le pedí que me lo dejase un momento para hacer un prueba rápida, de esas que no tienen maldito rigor por las prisas y que no cayese en saco roto la oferta. En casa intentaría apreciar si había realmente diferencias.

Para que se hagan una idea de cómo fue la prueba y el nulo rigor que podría tener, describo lo realizado. Cerca de una de las estatuas que hay en el jardín, fijé el ajuste a prioridad a la apertura, Elegí una apertura de 5,6 y un ISO de 200, ya que las condiciones de luz no eran demasiado buenas. La longitud focal estuvo en torno a las 110 o 120 mm. En el caso del 18-200 activé la reducción de vibraciones (había que darle todas las ventajas posibles) y usé, en los dos casos, el enfoque automático. Era una prueba rápida, ya dije. Saqué dos fotos con cada uno de los objetivos y fin. Ya podíamos volver a casa. Desde luego, como experimento, adolece de todos los errores que se pueden cometer frente al método científico.

A continuación están las dos imágenes capturadas. El único posproceso realizado fue convertirlas directamente a JPG con el 100% de calidad desde las imágenes NEF (RAW) obtenidas por la cámara. No se ha ajustado, en ninguno de los casos, la nitidez de la imagen, que Lightroom fija por defecto en un valor de 25. Primero aparece la imagen tomada con el 18-200 VR, seguida por la imagen tomada con el objetivo de Luis. Disculpen los problemas de encuadre, pero las prisas y el peso del 80-200 hicieron que no dedicase mucho tiempo a sacar una mejor imagen. No usé trípode.

18-200 - exp: 1/125 a f/5,6 - 120 mm - ISO 200 - VR ON

80-200 - exp: 1/100 a f/5,6 - 110 mm - ISO 200

Al tamaño que acompaña el artículo, de 214 píxeles de ancho por 320 de alto, no se aprecia una gran diferencia. A continuación unos recortes al 100%. Como antes, primero pongo el recorte de la imagen tomada con el Nikkor 18-200. A continuación el recorte de la imagen tomada con el 80-200. En total hay tres recortes.

18-200 VR

80-200

18-200 VR

80-200

18-200 VR

80-200

¿No resulta sorprendente? Al menos a mí me lo pareció. Cuando abrí ambas imágenes en mi equipo me quedé con la boca abierta. Me sorprendió, negativamente, que la imagen tomada con el 18-200, aún con el modo de reducción de vibraciones activado, pareciera adolecer y dar la sensación de sufrir de un mayor y pronunciado efecto de la trepidación. Eso que, en comparación con la tomada con el 80-200, la relación entre velocidad de obturación y longitud focal, fue mayor: 1/125 con el 18-200 frente a 1/100 con el 80-200. Y eso además de tener, como decía al principio de este párrafo, activo el modo de reducción de vibraciones. ¿Entonces, es trepidación o el desenfoque normal, producto de la deficiente calidad óptica, que se puede esperar de éste objetivo? ¿Se debe a un defecto en mi unidad y su VR o a un problema del que adolecen todos los 18-200? Tendré que quedar con Luis otro día para probar su unidad y compararla con la mía. ¿Has leído, Luis?

Conclusiones

¿Qué conclusiones se pueden sacar de un experimento de dos minutos hecho a toda prisa y sin definir ni controlar ninguna variable? Porque, sinceramente, quiero creer que la imagen tomada con mi 18-200 salió tan mal porque yo me equivoqué en algo. Me resulta difícil creer que haya una diferencia tan significativa en la calidad de ambas lentes. He llegado a pensar que se puede deber al filtro HAMA ultravioleta que le tengo siempre puesto a modo de protección. Tendré que comprobarlo. En cualquier caso fue un error hacer la prueba sin definir mejor la forma de la misma. Error porque llevo unos días luchando contra unas irrefrenables ganas de salir corriendo a comprar un 70-200 f/2,8…

En cuanto al peso, si bien es cierto que es algo más pesado que el 18-200, no supone un incremento considerable en cuanto al peso de mi ya sobrecargado conjunto. Al menos, en el poco tiempo que lo tuve en la mano, a mí no me pareció excesivamente pesado. Vamos, que podría cargar perfectamente todo el tiempo con él.

En fin… ¿Luis, cuándo quedamos para que me dejes probarlo de nuevo y salir definitivamente de dudas?

Esta entrada ha sido importada desde mi anterior blog: Píldoras para la egolatría

Es muy probable que el formato no haya quedado bien y/o que parte del contenido, como imágenes y vídeos, no sea visible. Asimismo los enlaces probablemente funcionen mal.

Por último pedir diculpas por el contenido. Es de muy mala calidad y la mayoría de las entradas recuperadas no merecían serlo. Pero aquí está esta entrada como ejemplo de que no me resulta fácil deshacerme de lo que había escrito. De verdad que lo siento muchísimo si has llegado aquí de forma accidental y te has parado a leerlo. 😔