Ataque puntual de aburrimiento

En la poco más de una semana que llevo en Madrid, es la primera vez que me siento aburrido. Ha sido una semana muy intensa y, en este momento previo a irme a la cama un domingo por la noche, he tenido ganas de no estar aquí y estar en casa con mi mujer. Vaya gilipollez. Una ducha calentita y a leer, qe es como se superan estas crisis.

Esta entrada ha sido importada desde mi anterior blog: Píldoras para la egolatría

Es muy probable que el formato no haya quedado bien y/o que parte del contenido, como imágenes y vídeos, no sea visible. Asimismo los enlaces probablemente funcionen mal.

Por último pedir diculpas por el contenido. Es de muy mala calidad y la mayoría de las entradas recuperadas no merecían serlo. Pero aquí está esta entrada como ejemplo de que no me resulta fácil deshacerme de lo que había escrito. De verdad que lo siento muchísimo si has llegado aquí de forma accidental y te has parado a leerlo. 😔